lunes, 5 de octubre de 2015

Chile -Advierten grave riesgo ambiental para la Isla de Chiloé -

 3-X-15 Diario Pag 12

Concesiones mineras: Advierten grave riesgo ambiental para la Isla de Chiloé - Entrevista a Alvaro Montaña

 “Existen cinco tipos de concesiones mineras en Chiloé, entre las cuales figuran oro, platino, carbón, turba y hierro. La más austral es la de isla Guafo, en este caso de carbón, de propiedad de South World Business S.A., una consultora chilena que entre otros negocios está detrás de la cuestionada central termoeléctrica a carbón y biomasa Pirquenes”.

Por Eduardo Burgos
Hace unos meses suena fuerte en el territorio insular el movimiento Defendamos Chiloé, del cual el geógrafo Álvaro Montaña es uno de sus integrantes más activos, quien permanentemente recorre distintos puntos de la provincia, realizando una serie de interesantes exposiciones -o conversatorios, como él prefiere llamarles-, visualizando algunas de las problemáticas que aquejan al Archipiélago, entre ellos la construcción del puente sobre el canal de Chacao.
Uno de esos temas que el joven geógrafo chilote ha puesto en el tapete de la discusión es el de las más de cien concesiones mineras en Chiloé, las cuales se extienden por una gran parte del territorio y hasta el momento habían pasado desapercibidas para el común de los habitantes, aun cuando muchas de ellas están bajo sus propios terrenos.
PELIGROS
El profesional advierte que existen cinco tipos de concesiones mineras en Chiloé, entre las cuales figuran oro, platino, carbón, turba y hierro. La más austral es la de isla Guafo, en este caso de carbón, de propiedad de South World Business S.A., una consultora chilena que entre otros negocios está detrás de la cuestionada central termoeléctrica a carbón y biomasa Pirquenes.
Los dueños de South World Business S.A. son Paul Fontaine y Rodrigo Danús. El primero es ex asesor económico del ex candidato presidencial del PRO, Marco Enríquez-Ominami, y posteriormente asesoró al ex Presidente Sebastián Piñera. El segundo, fue gerente de desarrollo internacional de Endesa y otros cargos ejecutivos ligados a la minería y el negocio energético.
Montaña relaciona esta concesión de exploración con la proyección de instalación de 15 puertos marítimos en la ciudad de Quellón, señalando y preguntando que “uno puede especular, aunque puede no estar relacionado, pero por qué tantos puertos para Quellón”.
DETALLE
De las concesiones mineras más preocupantes -advierte el geógrafo-, están las de las playas del lado Pacífico de la Isla Grande, donde el dueño es uno solo, Juan José Quijano Fernández, un conocido especulador minero, propietario de la minera “Princesa Caballo”, que ha saltado a la fama por el conflicto con la comunidad de Colliguay, enmarcado en una exploración minera en búsqueda de cobre. En el caso de las concesiones de este empresario en Chiloé, estás son del tipo perpetuas.
Es complejo cuando la minería entra en conflicto con zonas que tienen otra vocación territorial. No es lo mismo pensar en el derecho minero en el norte, que en algunos casos son zonas de baja fragilidad ambiental, donde una concesión minera puede estar bien. Pero no es lo mismo cuando la minería entra en conflicto con zonas de alto valor ambiental, como los glaciares, o Chiloé, donde es más particular y estaría entrando en conflicto con la producción de machas, el turismo, la pesca de orilla, o la recolección de cochayuyo, que son usos ancestrales de este territorio, o en isla Guafo, que es un lugar con un valor ambiental enorme. Es un conflicto social y ambiental latente.
-La diferencia es que estas concesiones son de explotación, que son a perpetuidad y que caducan solamente si se dejan de pagar las contribuciones u otras causales de este tipo.
-Son fáciles de tramitar y cualquiera puede hacerlo, a través del Servicio Nacional de Geología y Minería, que más que nada llevan el catastro, pero principalmente se hace a través de los Juzgados de Policía Local, donde los tribunales locales de justicia son los que dan los permisos.
En el fondo es llegar y pedir y lo que exigen es hacer alguna geo mensura de los deslindes y otros aspectos, pero no hay mayores regulaciones. Por eso es que a raíz de esta simplicidad es que el año pasado la bancada de diputados del Partido Socialista llamó a una sesión especial en el Congreso, para ver el tema del conflicto que hay entre comunidades indígenas y concesiones mineras, sobre todo en la zona costera de Osorno.
-No se puede, a no ser que se haga un cambio constitucional, porque el derecho minero está asegurado por la Ley Orgánica de Minería, a través del Código Minero, pero también por la Constitución. Entonces, jurídicamente se tiene el mayor rango posible.
-Hay sólo un par de casos, en Choroihué (Ancud) y en Romazal (Chonchi), a escala semi industrial, que para Chiloé es harto, por el rol ambiental que cumplen estos lugares. La turba es una sustancia fósil, de materia orgánica en descomposición. Son como los glaciares chilotes, en cuanto a la reserva de agua dulce y además es un material fósil no renovable con un tremendo valor ambiental.
-Ellos piden las concesiones y les sirven para acreditar patrimonio ante la banca, entonces cuando, por ejemplo, va a pedir un préstamo para construir un parque eólico, dicen ‘tengo un bien que es una concesión minera’.
Si lo analizamos, el Parque Pichihué tiene, el San Pedro también, el Catiao tiene. Esto también les asegura las líneas de transmisión.
Hay estas concesiones que uno ve en la rutas de Huicha, Caulín, Pugueñún, Recta Chacao, Butamanga; todas en Ancud. Con concesiones de la empresa Branex, que es una constructora y cuyas demarcaciones son esos monolitos de color blanco que uno ve a orilla de camino. En este caso la concesión es de ripios, que es común en todo Chiloé, producto de depósitos glaciares.
Ahora, para qué tanto ripio, podemos especular muchas razones que probablemente tienen que ver con el tema del puente o de la doble vía, ya que están ubicadas principalmente en zonas cercanas a Chacao.
Yo creo que puede ser un tema especulativo, tal como puede serlo también las concesiones de la costa oeste, ya que no se sabe de ningún proyecto de explotación minera.
Totalmente, porque las playas, por ejemplo, son bienes nacionales de uso público o, en otros casos, lugares que son patrimonio comunitario y ambiental, porque la Constitución también habla de la función social de la propiedad y en este caso esta puede ser belleza paisajística, producción de machas, producción de aguas (en el caso de una turbera). O sea, la Constitución asegura la función social de la propiedad, pero a la vez pone la exploración y la explotación minera al mismo nivel.
Este es un tema legislativo, que es herencia del modelo dictatorial de Augusto Pinochet, donde la Constitución de la República hoy es la que sustenta este tipo de cosas, ya que cuando uno ve los 11 pilares que subsisten del modelo dictatorial, tienes el Código Minero, el Decreto Ley 701 que favorece las plantaciones forestales, el sistema de Salud y un montón de cosas.
Pero en este caso concreto, hay una constitución política que es del año 1980, que eleva los derechos del minero por sobre los derechos del dueño de la tierra.
Entonces cuando se dice que la dictadura pasó, tenemos que sigue vigente con estos pilares, independiente de la postura política que uno tenga.
Fuente: La Estrella de Chiloé

  http://www.biodiversidadla.org/Principal/Secciones/Documentos/Concesiones_mineras_Advierten_grave_riesgo_ambiental_para_la_Isla_de_Chiloe_-_Entrevista_a_Alvaro_Montana

Arg- Cuando las pantallas no son amistosas

 3-x-15 Diario Pag 12-

 Por Sonia Santoro
UN ESTUDIO REVELO QUE LOS PROGRAMAS MAGAZINES TELEVISIVOS VULNERAN DERECHOS DE NIÑAS, NIÑOS Y ADOLESCENTES

Cuando las pantallas no son amistosas

El monitoreo de la Autoridad Federal de Aplicación (Afsca) detectó que la televisión construye imágenes negativas de niñas y niños, aunque algo menos de adolescentes. Además, la TV argentina no alienta su participación activa y como sujetos de derecho.

–Si es hijo biológico mío, no le doy la mitad de la casa, le doy la casa y todo lo que tengo.
–¿Y si no lo es? –pregunta el periodista.
–Desgraciadamente, no es mi bebé –mientras tanto muestran fotos de la pareja con el bebé con la cara blureada–. Ella se hacía la víctima de que yo salía con chicas, y ella estaba haciendo lo mismo como hizo siempre...
Probablemente gran parte de la audiencia de la TV argentina pueda poner nombre y apellido a esta conversación que se dio en el mes de abril en un programa de televisión, y que produjo una “constante vulneración al derecho a la integridad personal del niño (como también a su intimidad familiar e identidad)”, según definió el Monitoreo de Niñez y Adolescencia en programas de magazines televisivos que se presentó ayer. El caso no es la excepción. El 49 por ciento de los contenidos que aparecen en magazines televisivos relacionados con chicos y chicas es negativo. No se los considera como sujetos de derecho y se los sobreexpone. En cambio, la imagen de la adolescencia es positiva.
El diálogo sobre la filiación y la herencia de bienes, que pudo leerse en las primeras líneas, se produjo durante el ciclo Nosotros al mediodía el día miércoles 15 de abril en que se abordó el conflicto entre la bailarina Gisela Bernal y el productor teatral Ariel Diwan, a partir de que Diwan se presentara en diversos programas televisivos para revelar que, tras los resultados de un ADN, tomó conocimiento de que no sería el padre del bebé de Bernal. Y es uno de los ejemplos que el monitoreo, elaborado por la Dirección de Investigación y Producción de la Autoridad Federal de Aplicación (Afsca), en base a los Criterios de Calidad del Consejo Asesor Audiovisual para la Infancia (Conacai), presentó ayer, al dar a conocer observaciones y resultados del estudio.
El monitoreo analizó los programas de formato magazine difundidos a través de los cinco canales de televisión abierta entre el lunes 13 y el viernes 17 de abril de 2015: Desayuno americano, de América TV; Vivo en Argentina y Una tarde cualquiera (UTCQ), de la TV Pública; ¡Qué mañana!, de Canal 9; AM (Antes del Mediodía), de Telefe; Nosotros al mediodía, y El diario de Mariana, de Canal 13.
“El objetivo es visibilizar la temática, para que sirva como herramienta para la gente que está trabajando y para los futuros laburantes del campo de la comunicación. Y también para difundir, porque acá claramente se ven las cosas maravillosas que pueden hacer cuando se les da voz (a los adolescentes). También por la contraria, cuando se vulnera el derecho de privacidad, intimidad, de qué estamos hablando”, explicó Alicia Ramos, directora de Investigación y Producción de Afsca y responsable del monitoreo.

Niños en negativo

De las 62 horas visualizadas, “el 27,2 por ciento de la programación tematizó contenidos relacionados con niños, niñas y adolescentes”, dice el informe. “Las tematizaciones positivas abarcaron el 23,2 por ciento de la programación y las tematizaciones que combinaron elementos positivos y negativos reunieron el 23,6 por ciento de los contenidos, superando así levemente a los tratamientos positivos. La amplia mayoría de las tematizaciones fueron negativas, éstas alcanzaron el 49 por ciento de los contenidos emitidos. El 4,2 por ciento restante da cuenta de segmentos que si bien abordaron temas ligados a la niñez y la adolescencia, no presentaron elementos positivos o negativos relevantes.”
Es decir que se habla de temas que involucran a niños, niñas y adolescentes (NNyA), pero el tratamiento es negativo o destaca aspectos negativos: tratamiento espectacularizado de las temáticas, ridiculización de NNyA y/o presentarlos como objeto de entretenimiento, adultización. No hay “una participación activa y un rol como sujetos de derecho”, tal como se propone la Convención de los Derechos del Niño.
–¿La sorprendió el tratamiento negativo ligado de niños y niñas?
–Me sorprendió encontrar una tematización negativa en cuanto a la niñez pero eso se revierte en la mirada positiva de la adolescencia, que siempre es la franja etaria que se estigmatiza (ver aparte). Lo importante es el recorte que tomamos porque en los noticieros la imagen de los adolescentes es negativa, y en este tipo de programas, con otro formato, en muchos casos la mirada es positiva.
–¿Cómo explica la mirada negativa de la niñez?
–Son disputas de adultos donde los nenes quedan rehenes de esas situaciones. Así y todo, lo que está claro es que los chicos no son sujetos pleno de derecho.

La infancia como espectáculo

Los niños, niñas y adolescentes no escapan al tratamiento espectacular con los que muchos programas televisivos buscan rating: sobreexposición de la intimidad, búsqueda del escándalo, provocación de situaciones que ponen a sus protagonistas al borde de la humillación. Una explicación posible y llamativa al mismo tiempo es que el 48,3 por ciento de los contenidos que involucran a NNyA apareció en la sección Espectáculos: se trató principalmente de conflictos entre parejas y familias famosas.
El 62 por ciento de las tematizaciones no presenta a los niños, niñas y adolescentes como sujetos de derechos. El monitoreo muestra preocupación por la “extraordinariamente alta” identificación (61 por ciento de los casos) de los niños en la pantalla. “Este dato resulta preocupante porque, como se ha venido planteando a lo largo de este trabajo, la exposición de NNyA y en particular de niñas y niños, está directamente relacionada con disputas que involucran una alta carga de violencia entre personas adultas.” En este sentido, más problemático aún es que en casi todos los contenidos donde se identificó a los niños y niñas de manera directa o indirecta “tuvieron un tratamiento integral negativo (71 por ciento) o con marcada presencia de elementos negativos (26 por ciento).”
“La desprotección de la identidad promovida por estas producciones televisivas es inquietante ya que no sólo lesionan la dignidad, la integridad y la reputación de NNyA sino que pueden dañar además su desarrollo y vida social, al suscitar estigmatizaciones y discriminaciones en sus ámbitos de socialización tales como escuelas, barrios, clubes y otros espacios en los que realizan sus actividades”, dice el monitoreo.