El 40 por ciento de los hombres españoles han demandado, en algún momento, servicios de prostitución
Madrid, . La
prostitución es una forma de violencia contra todas las mujeres que
conecta con el grave fenómeno de la trata de personas con fines de
explotación sexual. Esta es la denuncia que desemboca en la necesidad de
acabar con la normalización social de esta actividad. La Comisión para
la Investigación de malos tratos a mujeres junto a la Plataforma de
Organizaciones de mujeres (CATW), defendieron en Granada una
modificación legislativa que multe a los demandantes de servicios, a sus
proxenetas y proteja a las mujeres, las auténticas víctimas.
La responsable
de la Comisión para la Investigación de malos tratos a mujeres, Sara
Vicente, denunció que el 40 por ciento de los hombres españoles ha
demandado en algún momento servicios de prostitución. “Se está dando un
mensaje de legitimidad social a los comportamientos de uso y abuso sobre
las mujeres”, aseguraba en la presentación de las primeras jornadas
internaciones sobre Prostitución y Trata de Mujeres celebradas en
Granada.
Las
organizaciones participantes defendieron la importancia de las políticas
y leyes que trabajen en la lucha no solo contra la trata, sino también
contra la prostitución, ya que son fenómenos muy conectados. “Trabajar
para bajar y acabar con la prostitución, hará también que baje la trata
con fines de explotación sexual”.
En las
jornadas, que se celebraron en lunes, Día internacional contra la
explotación sexual, se recordó que de los 4 millones de personas que son
víctimas de la trata en el mundo, el 80 por ciento lo son para la
explotación sexual, según datos de Naciones Unidas. En Europa la cifra
de mujeres víctimas de la trata con fines de explotación sexual en el
año 2010 representa el 96 por ciento del total de personas traficadas.
Las personas
expertas reprocharon las normativas municipales que sancionan a las
mujeres en lugar de a sus explotadores y abogan por la penalización de
la demanda de prostitución como una medida necesaria para erradicar la
explotación sexual y la trata a la vez que se aprueben leyes que impidan
la reglamentación de la prostitución. “Hay que penalizar toda forma de
proxenetismo, también el lucrativo, aquel que se beneficia de la
explotación sexual de otra persona, por ejemplo, a través del alquiler
del local”, afirma Sara Vicente, explicando algunas de las conclusiones
de las jornadas a Amecopress.
Prohibición de anuncios
Otro consenso
de la reflexión y el intercambio realizado en Granada es la exigencia de
promover una regulación que prohíba los anuncios de prostitución en
prensa, “ya que hemos visto que la autorregulación no funciona”.
Entre las
peticiones que realizan estas organizaciones, destaca la “urgente
transposición” a nuestra legislación interna de la Directiva 2011/36 UE
del Parlamento Europeo y del Consejo de 5 de abril de 2011 y de todas
las medidas de protección a las mujeres víctimas de la explotación
sexual en ella contempladas para garantizar el acceso al proceso
judicial de un modo gratuito, así como al resto de los recursos de apoyo
previstos, sin que esté vinculado dicho apoyo a la colaboración en un
procedimiento judicial, sino a su consideración como víctima de una
vulneración de los derechos humanos. Es una normativa que plantea
incluso la posibilidad de penalizar la demanda.
Las
organizaciones exigen también que se garantice el acceso a los servicios
sanitarios de todas las mujeres en situación de trata y explotación
sexual “con independencia de su situación administrativa”.
Las expertas
reconocen que no se trata solo de establecer normas, también hay que
aplicar recursos que permitan su implementación. Pero sobre todo, es
necesario un cambio de mentalidad, de cultura. Legitimar la prostitución
es justificar la desigualdad. Es fundamental prevenir, educar en
igualdad y cambiar el modelo de relaciones entre hombres y mujeres
vigente.
Fotos archivo AmecoPress
http://www.amecopress.net/spip.php?article10115
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