El abuso sexual, la violencia física y psicológica, y el
acoso sexual son formas de violencia que tienen lugar en todos los
entornos. En la mayoría de las sociedades, el abuso sexual de niñas,
niños y adolescentes es más común dentro del hogar o es cometido por una
persona conocida por la familia.
En lo que va del año se han atendido 8646 casos por violencia familiar y sexual en niñas, niños y adolescentes, de los cuales 6017 son mujeres y 2629 varones.
El abuso sexual es una de las peores agresiones que puede sufrir una persona. Siempre va a causar algún tipo de trauma, y por ser un trauma debe ser tratado a lo largo de la vida.
La violencia sexual no solo les roba la confianza en sí mismos dificultando la posibilidad de llegar a ser exitoso y obtener mejores oportunidades en la vida, sino que los deja traumatizados.
Este trauma generado dependerá de la edad que tenga el niño, niña o adolescente, del tipo de abuso sexual y del contexto en el que la familia lleve este proceso.
Existen prejuicios en relación al abuso sexual que sufren los varones y se teme que se vuelvan homosexuales, por ende muchas familias deciden callar; en este caso las consecuencias y el no tratar a la persona abusada, puede generar mayores problemas en su edad adulta.
Para aprender, a crecer y convertirse en una persona adulta saludable y exitosa, los niños y niñas deben tener un mundo donde se sientan contentos y seguros de sí mismos.
http://www.rpp.com.pe/
En lo que va del año se han atendido 8646 casos por violencia familiar y sexual en niñas, niños y adolescentes, de los cuales 6017 son mujeres y 2629 varones.
El abuso sexual es una de las peores agresiones que puede sufrir una persona. Siempre va a causar algún tipo de trauma, y por ser un trauma debe ser tratado a lo largo de la vida.
La violencia sexual no solo les roba la confianza en sí mismos dificultando la posibilidad de llegar a ser exitoso y obtener mejores oportunidades en la vida, sino que los deja traumatizados.
Este trauma generado dependerá de la edad que tenga el niño, niña o adolescente, del tipo de abuso sexual y del contexto en el que la familia lleve este proceso.
Existen prejuicios en relación al abuso sexual que sufren los varones y se teme que se vuelvan homosexuales, por ende muchas familias deciden callar; en este caso las consecuencias y el no tratar a la persona abusada, puede generar mayores problemas en su edad adulta.
Para aprender, a crecer y convertirse en una persona adulta saludable y exitosa, los niños y niñas deben tener un mundo donde se sientan contentos y seguros de sí mismos.
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